lunes, 24 de agosto de 2009

he hecho mi tarea



Espero no reprobar...



No he hecho grandes cosas para ir al Ultra Trail du Mont Blanc 2009, nada de grandes entrenamientos como he leído que hacen muchas personas, pero que sin duda me hubiese gustado hacer. Entrenamientos admirables de muchos kilómetros, 100 o más. Muchas carreras de preparación, de distancias alucinantes, en gran variedad de terrenos, de climas, etc... Sin duda hay que ir física y mentalmente muy bien preparado. Muchos han ido tres, cuatro veces, quizá más, a esta carrera, van año tras año, para cualquier europeo es casi que normal el asunto, atravesar un par de fronteras, con tomar un tren, un corto vuelo y hasta un autobús llegan a Chamonix en Francia, hacen su carrera y se devuelven a casa, pero a pesar de la cercanía no deja de ser emocionante para estas personas. Es una experiencia que en muchos casos les ha marcado la vida, no solo deportivamente. Las emociones que dicen sentir son indescriptibles y aunque algunas están reflejadas en crónicas, nunca se plasma lo que realmente se vive, hay que sentirlo.


Si la experiencia es tal para un Español, Italiano, Alemán, Suizo o Norteamericano, siendo su primera vez o no, habiendo culminado o no, imaginen lo que puede significar para un Venezolano que cruza el charco para vivir en carne propia esa experiencia. De facto, ir y culminar significara el mayor logro de mi carrera deportiva, de la carrera deportiva de un Venezolano normal. No hay persona con quien haya conversado que no le haya dicho sobre mi proyecto, el Ultra Trail du Mont Blanc 2009. Mi medio, este blog, ha servido para informar a algunos, últimamente el Facebook con algo más de alcance también. Y en persona, a cualquiera con quien me haya cruzado, que haya tenido algunos minutos para conversar antes o después de algún entrenamiento en el Parque Nacional El Ávila, ni se diga…


Y para quienes no se acuerdan o no saben, el Ultra Trail du Mont Blanc es una carrera de montaña, en autosuficiencia y semiautónoma, que recorre todo el macizo del Mont Blanc, 167 kilómetros a pie puro, un desnivel acumulado de más de 18000 metros, 46 horas como máximo. Empiezan 2500 personas y terminan poco mas de 1000. Solo un evento deportivo en el mundo pasa por tantos países como el UTMB y no es más que el Tour de Francia, que pasa por cuatro países. El UTMB atraviesa tres, parte de Francia, sigue a Italia, pasa a Suiza y llega nuevamente a Francia. La reina de las carreras de montaña.


Solo una semana me separa de comenzar dicho reto al cual iré solo con el fin de terminar. Terminar ya será un logro, anhelado por muchos y logrado por pocos. La próxima vez que escriba en el blog será para empezar la crónica de este viaje, independientemente del resultado que obtenga. Este asunto, aunque es una carrera de montaña a pie, poco tiene que ver con correr. Las palabras de animo y aliento de cada una de esas personas que saben de mi proyecto, que me han escrito y demostrado su afecto sin duda sera la motivacion necesaria para que pueda llevar a buen termino este asunto. A todos ustedes: gracias totales!


Mi último entrenamiento largo fue la tan esperada SkyRace, de aproximadamente 27 km y 2500 metros de desnivel positivo, el 9 de agosto de este año, a solo 19 días del UTMB y a solo tres días de emprender mi viaje hacia Milano, Italia, donde José y Anita y en donde esperaríamos el momento de la verdad el 28 de agosto. Milano esta a poco más de dos horas de Courmayeur, donde nos hospedaremos el día 25, a solo tres días del día. Desde Courmayeur saldra el mismo dia 28 de agosto a las 10 a.m. la CCC (Chamonix-Courmayeur-Chamonix), una carrera de 98 km que estaran realizando tambien los Venezolanos Felix Rojas y Maydelene Ceballos... la hermana menor de la UTMB.


No estaba seguro de hacer la skyrace, tanto así que dos días antes fue que me inscribí. Al día siguiente fui y busque el material: una bonita y muy funcional camisa, un rompeviento "vinotinto", algo inédito en dar en este país en cualquier carrera, el número y otras cosillas. Una carrera hecha con la colaboración desinteresada de muchas personas, prácticamente con las uñas pero que al final logro muy buenos resultados. Cerca de 230 personas. Muchas desconocían lo duro que podía resultar porque muuuy pocas habían participado en la edición del año 2003, 2004 y 2005. Ni pensar que en el 2002 hicieron una skyrace donde el ganador hizo 4 horas con 21 minutos en una ruta el doble de dura y en donde yo termine en 5 horas con 11 minutos.


Y no estaba seguro de hacerla porque en el año 2003 cuando la hice, que fue la única vez que la hice, mi tiempo fue de 4 horas con 33 minutos. Cuatro horas echándole pichón parejo. En aquella ocasión llegue en el puesto 17 de no más de 60 personas. Hay cosas que recuerdo claramente, otras que en lo absoluto. No recuerdo la partida ni todo el trayecto hasta piedra el indio. Si recuerdo claramente cuando subiendo hacia cabeza de elefante me pasaron los amigos Pedro Vallejo y Gabriel, entre otros, a quienes en Lagunazo ya los estaba alcanzando. No sé en qué tiempo llegue a Tenería, ni a Piedra El Indio, tampoco a la Cruz de los Palmeros, ni a la Silla, en realidad no recuerdo ningún parcial de aquella ocasión, solo sensaciones, como la de cansancio bajando a Loma del Cuño y que tambien fui uno de los ultimos en pasar por el ajustado corte en la Silla de Caracas. También recuerdo como me paso el señor Gonzalo Silva en el Cortafuegos después de venir muy cerca de mí desde el Hotel Humboldt. También recuerdo como alcance y pase a Daniel Santana en la última subida antes de llegar a Loma Serrano. Por demás no creo recordar sino la dureza de la carrera. Es que ni fotos tengo de aquella ocasión, a pesar que en internet aun se pueden ver los resultados.


La skyrace de este año era exactamente la misma ruta de hace 5 años, que hice unas 5 veces completa y otras tantas veces en partes, a diferentes ritmos. Al ver la larga lista de inscritos hice mi pronóstico y siendo muy, pero muy optimista, me ubique entre los primeros 25 de la general y en el puesto 10 de la categoría. Siempre me pasa que estoy siempre por debajo de mis pronósticos y esta no sería la excepción y así se lo hice saber al amigo Luis Pinto con quien converse mientras retiraba el material y conversaba con alguna que otra persona.


Como sea, me levante ese día a las 5 a.m. y con toda la calma del mundo me prepare. Fui al baño, me cepille, me puse un short, mi camisa raid light, no recuerdo que medias y los salomón que ya no me hacen ampollas. También llene el camelbak de una gavera de hielo con medio litro de gatorade y recuerdo haber colocado también una barra energética que como siempre nunca me como. Baje al carro, mi esposa iría mas tarde con mis hijos a verme llegar, a quien dije llegaría a las 11 con 30 minutos, es decir, pensé en 4 horas con 30 minutos. La idea era hacer menos de 5 horas.


Llegue al estacionamiento de la Clínica El Ávila a eso de 6 con 15 minutos de la mañana y allí deje el vehículo. Julio Bonilla, con quien baje velozmente desde Tenería hasta Cachimbo en la segunda valida de carreras de montaña Gatorade, me reconoció y dio la cola hasta la entrada de Sabasnieves en su moto. Y conversando con el mismo llegamos a donde seria la partida. Me había planteado algunas metas, algunos tiempos, pero en realidad estaría más pendiente de no hacerme algún daño que me fuera a perjudicar para la UTMB. La vaina es que es dificil controlar el orgullo competitivo.


Dieron la partida finalmente a las 7 a.m., como lo tenían pautado. Segundos antes estaba en el arco de salida casi sin darme cuenta. Que cagante es escuchar ese ¡tres, ¡dos, ¡uno!. Salí a un paso más o menos rápido a fin de tratar en lo posible evitar los embudos que venían. En el puentecito de Sabasnieves ya llevaba unos segundos menos que mi mejor pronostico, creo que 2 minutos con 16 segundos. No me agarro el embudo y pude correr con facilidad la primera parte de la carrera. Llegue a Quebrada Quintero en 6 minutos con 56 segundos. Lo que siguió fue disputar algunas posiciones con algunas personas, me adelantaban, los alcanzaba, me adelantaban nuevamente. Recuerdo a un destacado triatlonista en este plan. A Quebrada Pajaritos llegue en 18 minutos con 31 segundos, lugar donde ya iba en la posición 25. Extrañamente Luis Pinto, a quien le había dicho mi pronóstico, fue quien me dio dicha información. Hice la subida de Los Torres sintiéndome fuerte, incluso alcanzando a un par de corredores, paradójicamente pasando a uno que en el 2002 había adelantado en el mismo lugar… la historia se repetía.


En Los Torres llevaba un tiempazo, si mal no recuerdo creo que 35 minutos y algunos segundos. Camino a Tenería recuerdo haber ido con Rosa Méndez, quien gano la carrera en la categoría femenino y quien me pregunto si había visto alguna otra femenina... le dije que no y seguí, aunque la lleve cerca un buen rato. Finalmente llegue a Tenería y vi en el reloj 54 minutos con 2 segundos y me alegre, más bien había pensado en pasar en 58 minutos. Comenzó a subir hacia el Pico Oriental, la parte más dura de la carrera en justo 1 hora con 10 segundos. En tiempos pasados esta subida la hacía en 48 minutos o menos, pero esta vez no tenía entrenamientos para tal tiempo. Venia la hora de sufrir.


Pedro, tal y como pasó hace 6 años, me pasó subiendo hacia Cabeza de Elefante y pensé: será que lo alcanzo en Lagunazo como hace 6 años? Pero lo dude enormemente ya que a los pocos minutos había dejado de verlo, imposible descontar esa ventaja, me dije. Al principio me sentía bien, me hidrataba suficientemente cada 5 minutos pero inevitablemente estaba cediendo a la subida. A pesar de mi condición solo una persona más me pasó allí y fue un Francés, de nombre Christopher, que junto a su pareja, residen en Venezuela y a duras penas machucan el español. Christopher utilizaba bastones y venia con bastante fuerza y rapidez. Le aguante unos 10 minutos antes de cederle el paso para no frenarlo por mas tiempo. Aunque deduje que lo alcanzaría bajando después de Pico Oriental hacia la Silla, como efectivamente sucedió.


Finalmente llegue a la Cruz de Los Palmeros en 1 hora con 58 minutos. Mi idea era llegar allí por debajo de las 2 horas y lo estaba logrando, aunque me lamente no estar en buena forma y haber llegado en 10 minutos menos como he hecho en el pasado. En 2 horas con 6 minutos estaba en el Pico Oriental a donde llegue comiendo un bocadillo de plátano que Carlos del Castillo me había dado en la Cruz. El no siguió en la carrera, se detuvo allí quien sabe por cual razón.


Seguí mi camino a La Silla de Caracas, a donde llegue en 2 horas con 20 minutos después de pasar al Francés y a un Mexicano en la escarpada bajada. En La Silla el amigo Jefin Pérez, quien subió hasta ese punto expresamente para ello, me dio un Red Bull, que tome y literalmente me dio alas ya que después de tomarlo comencé a correr eufórico, tanto así que ni me fije en cuanto tiempo llegue a Lagunazo, donde la historia se repetía para Pedro a quien pude medio ver al pasar a su lado literalmente corriendo y seguír así mismo hacia el Tanque de Boquerón donde mi reloj marco 2 horas con 55 minutos. Realmente iba bastante bien. En la subida al Hotel Humboldt alcance y pase a José Márquez, que en el maratón Hebraica de este año me había sacado 15 minutos y a quien veía siempre entrenando bastante duro. Sabía que lo alcanzaría tarde o temprano, estas carreras largas son otra cosa. En 3 horas con 5 minutos estaba en el Hotel Humboldt donde tome agua, un vaso de bebida hidratante y seguí.


Bajando hacia Papelón divise a Reyes, que iba con otro corredor. Los alcance y aunque pase y seguí, Reyes se fue detrás de mi muy cerca. En este trayecto tuve algunos conatos de caída, por ir muy rápido en la bajada, lo que me asusto un poco y disminuí un poco el paso. No dio resultado: justo antes de llegar a Loma del Cuño perdí la concentración estúpidamente y entonces el carajo que muy pocas veces en su vida se ha caído en una carrera de montaña, rodo feísimo al meter el pie en una canal. En ese momento venia pensando: Reyes va detrás de mí, chupándome rueda, pero seguro al llegar al Cortafuegos me deja botado como lo hizo hace 6 años el señor Gonzalo Silva…. Y justo al terminar de pensar esto metí el pie en la canal. Como iba bastante rápido rebote del piso. A la altura del muslo derecho me hice un gran raspón y otras laceraciones en la misma pierna. Me pare y seguí corriendo de inmediato pero ya no era el mismo.


Cojee un rato trotando, sentía dolor y una gran presión en la herida que no me atrevía a ver. Me descompuso la caída y Reyes seguía detrás de mí. Cuando me alcanzo finalmente en el Cortafuegos le dije que me había caído y me dijo que me había visto. Entonces le di la mano y desee suerte, sabía que se iría en el Cortafuegos como efectivamente sucedió. Fue un placer haber corrido esos kilómetros con un corredor de la talla de Reyes que ha hecho carreras internacionales logrando destacados resultados.


Hacer el Cortafuegos fue un viacrucis, sin duda la caída me había descompuesto aunque con todo y eso en 3 horas con 55 minutos estaba en PGP Chacaíto y en la posición 15. Despues de allí recuerdo que me detuve finalmente a caminar, me induje nauseas para vomitar un par de veces poco después de la quebrada Chacaito hasta que, sin pararme, llegue a Loma Serrano, totalmente descompuesto para la bajada final, donde dos personas me pasaron pero que no me importo mucho.


Llegue a la meta en 4 horas con 43 minutos y 56 segundos, prácticamente 10 minutos mas que mi mejor tiempo, 19 en la general y 6to en la categoría, y con el sabor de boca de saber que pude haber hecho una buena marca personal de no haberme caído ya que para el momento venia muy bien y no faltando mucho para la carrera. Si las categorias ubiesen sido como con frecuencia soy, llego de 3ero en la categoria, pero pelear contra carajos entre 35 y 44 años no es facil.


Posteriormente compati con mi esposa e hijos en la llegada junto a otros corredores, amigos y conocidos. Habiendo competido en la Skyrace pensando en el UTMB me habia quitado un gran peso de encima, era un examen que tenia que aprobar y lo hice.

Esta es la crónica que quiza los nervios de tener tan cerca el Ultra Trail du Mont Blanc me han hecho escribir apuradamente porque no queria dejar pasar el relato de la SkyRace. No estoy nervioso ni asustado, tampoco preocupado, me siento tranquilo y espero el momento. Mañana arrancamos a Courmayeur, ya no queda nada.


El Viernes 28 de Agosto a las 6:30 p.m. (12 del medio dia de Caracas) comienza esta aventura, a quien guste puede ver en directo mi evolucion en la carrera solo con meterse en esta pagina UTMB (http://www.ultratrailmb.com/accueil.php) , colocar el numero de mi dorsal que es el 2501 y van a tener a traves del Google Earth, informacion sobre mis tiempos en los diferentes puntos de control asi como mi posicion actual. No estoy seguro pero creo que tambien se podran enviar mensajes que recibiremos en los diferentes puntos de control.


Y como yo, estaran otros Venezolanos, Jesus Zerpa con el Nro.3493 , Felix Rojas con el Nro. 8916 y Maydelene Ceballos con el Nro. 8917, partiran a las 3:30 a.m. del via Viernes y quienes seguro agradeceremos la atencion que nos presten en esas 46 horas que estaremos petando las montañas del Mont Blanc.

3 comentarios:

JMPXTR dijo...

Hola Jesus,
te deseo toda la suerte del mundo, que sabes que este tipo de pruebas tambien hace falta. Después de venir de hacer el TMB solo te puedo decir que tienes terreno para soltar piernas, así que sube a ritmo constante y aprovecha los llanos y bajadas para dosificar fuerzas, la clave esta en tu cabeza, es lo más que debes usar.
SUERTE y que seas FINISHER.

Gunther Stuart dijo...

Que tal Jesús, bueno hermano te repito la frase que le escribi a Félix,la mejor de las suertes, ya estás sobre el burro, termina de arrearlo, trataré de seguirlos via electrónica y a la esperá de tu crónica con respecto a la carrera, SUERTE!!!!

anita (la gurisa) dijo...

desde ayer que estoy pensando que andás correteando por ahi!

fuerza, fuerza, fuerza...!