Ciertamente llevo 3 semanas haciendo cada domingo poco mas de 40 kilometros, todos en la montaña. Los primeros los de la perdida, en los cuales conoci a El Joe, terminaron siendo mas de 44 km, la semana siguiente fueron 42 y pico de km, en los cuales hice la misma ruta del maraton de montaña del hebraica hasta el tanque de Estribo Duarte y de regreso al origen. Finalmente el domingo pasado fueron poco mas de 40 km distribuidos en 4 cortafuegos mas la subida desde el estacionamiento del Hotel Avila... En los primeros me eche como 11 horas (con todo y perdida), los segundos fueron 6 horas con 22 minutos y los terceros fueron 4 horas con 12 minutos. Porsupuesto que el desnivel tanto positivo como negativo influyeron en el tiempo empleado.
Y hablando del desnivel acumulado, tanto positivo, que denominare con el signo +, asi como el negativo que denominare con el signo - para no fastidiarme escribiendo lo mismo siempre, tengo que decir que, cuando me eche la perdida, el desnivel + acumulado fue de 4237 mts. aproximadamente..., cuando hice la ruta del maraton hebraica fue de 4417 aproximadamente y cuando hice los 4 CortaFuegos el desnivel + fue de 2767... Me generan alguna duda los valores medidos por el reloj en dichos entrenamientos pero tengo que decir que le creo, tengo que creerle. Como no creerle si el mismo reloj fue utilizado para medir palmo a palmo (y luego publicar en internet detalle a detalle) el año pasado en una carrera llamada Le Porte di Pietra, que realizan en Italia y que tiene una distancia de 7o km y pico y un desnivel + de casi 4000 metros, donde participo el campeonisimo Marco Olmo...
Y aunque cada uno de esos 40km fueron en pura montaña puedo decir que al igual que los tradicionales 42km de calle, llegue a ver el Muro del kilometro 30, que me atrapo despiadadamente en el kilometro 32/33. Esto lo experimente cuando hice la ruta del maraton de montaña del Club Hebraica, solo que en esta ocasion habia decidido partir en el estacionamiento del Hotel Avila, en San Bernardino, seguir la ruta y llegar al tanque de lo que llaman Estribo Duarte, aproximadamente a 20 km del lugar de origen. Posteriormente me regresaria por el mismo camino, cubriendo el mismo desnivel.
Recien empeze el entrenamiento de fondo laaargoo, el amigo Joao me habia sugerido acerca de una buena ruta, segun recuerdo la llamo algo asi como epica o una gran clasica. Dijo algo como que: ... ¿sabes cual seria una buena ruta?, no!, cual?... hacer la ruta del maraton de montaña Hebraica, pero ida y vuelta... No me parecio muy impresionante hacer eso, no me parecio atractiva de momento, como tambien pense en despues de estribo duarte, hacer esa bajada de 15 minutos y despues hacerla de regreso no es poca cosa, y mas cuando llevas casi tres horas de recorrido, salvo eso no me parecio "muy exigente", me parecio como una ruta muy corrible, con poco desnivel tanto positivo como negativo, para poder desplazar con velocidad, la cual no buscaba tanto como el fondo. Menosprecie, y quiza descalifique, su idea.
Pero entonces aparecio el color morado en las uñas de los pies, ese que tenia añooosss que no veia y que aparecia cuando los maltrataba mucho en las bajadas escabrosas de la montaña... Y aunque en parte se lo atribuyo a los zapatos que me quedan un poco flojos y al constante golpear del pie, con cada zancada, tengo que reconocer que es mi talon de aquiles. Ya me estaba pareciendo buena idea hacer la ruta que Joao me habia sugerido con la pequeña variante que llegaria al tanque de Estribo Duarte y me regresaria. Ya la habia medido con anterioridad y sabia que hasta alli rozaban los 20km: acerca del desnivel una vez el Polar RS800 sd me habia indicado que era cerca de 1800 metros +, pero no le crei mucho, pense que la marca no era especialista en ese campo de medir la acumulacion de desniveles. Polar es Polar.
Y llego el domingo que haria descansar a la uña morada del dedo gordo del pie. Despues de atravezar la ciudad y ver, como siempre, los espantosos choques en la autopista Francisco Fajardo, justamente donde hace un año tambien sufri un accidente, llegue al estacionamiento del Hotel Avila en San Bernardino, y a las 6 a.m. en punto arranque la menospreciada ruta. Insisti con las licras hasta los tobillos y el uniforme que habia utilizado, pense en el monte que habia en varias partes del camino. Lleve tres Power Gel, un par de galletas y el camel con red bull.
Hasta ese momento no habia hecho largos corriendo de manera continua sin alternarlo con caminar, cosa que hice en rutas anteriores por la montaña, por lo que sali a un paso basante discreto, lo que venia era bastante largo. Subi por San Bernardino sin problemas, nuevamente enfrente al cortafuegos sin ver un alma en todo el recorrido. Fue llegando a Loma Serrano que vi algun ser vivo, salvo el pollo o pichon de guacharaca que penso que me lo iba a comer y me acompaño pendejamente unos metros. En ese momento pense que ese pollo habia tenido bastante suerte, si ubiese sido un felino se lo ubiese comido papayisima, ya habia hecho mi buena labor del dia.
En el puentecitos de Sabasnieves alcance un carajo que tenia pinta que iba a hacer una ruta en el avila, pense: se esta entrenando para la carrera de montaña de la semana entrante y efectivamente asi fue. Me anime un poco con el, lo alcance y pase y segui con un paso firme sacandole cada vez mas ventaja. Ya tenia un motivo para no ir tan lento. Cuando pase la piedra El Indio vi que apenas estaba por el cruce Teneria, le habia sacado unos 8 minutos. El paso por Paraiso se me hizo largo, con todo y que iba trotandillo. Cuando finalmente llege al tanque de Estribo Duarte mi reloj marco 2 horas con 48 minutos, habia llegado a la mitad del recorrido y tocaba regresarme. Descanse unos 5 minutos, tome agua, llene el camel, me comi un power gel y asi mismo empeze a regresarme.
He corrido todas las ediciones del maraton de montaña del Club Hebraica. La han mantenido en el tiempo y se ha consolidado como una de las mas duras en el improvisado calendario de carreras de montaña que hay en el pais. En total no llega a 24 kilometros, lo que la hace dura es el desnivel y cambios de ritmo que tiene en todo su recorrido, aunque casi en su totalidad, con algunas excepciones, se puede correr. La primera vez hice 2:54 y pico. Llegue de 11 en la general, mareado, reventado, ido. Se hace mas dura cuando quieres ir mas rapido, definitivamente. Los años siguientes me he mantenido en ese orden, 2:58 y pico, 3 horas flat y en la reciente edicion 2:39 y piquito, sin duda record personal, 6to en la general y ganando la categoria por segunda vez consecutiva. A lo que quiero llegar es que en todas las ocasiones he llegado a Estribo Duarte incluso en 2 horas con 40 minutos, o casi..., ahorita llegue en 2 horas 48 minutos sabiendo que me tendria que regresar. No es tan mal tiempo, no estoy tan lento como pense.
Siguiendo mi camino procure mantener el mismo paso, a ver hasta donde aguantaba. Chequeaba los parciales donde previamente los habia marcado e incluso iba hasta 5 minutos mas rapido. Todo era el mundo feliz hasta que mi reloj marco 4 horas con 30 minutos, justo en la subida de Sabasnieves me dio un bajon arrechisimo. Algo habia fallado en ¿la alimentacion? , ¿el ritmo no tan lento?, ¿el fulano muro del kilometro 30 que me aparecio en el 33?, quien sabe, lo cierto es que comenze a caminar, muy, pero muy despacio. La subida que se puede hacer en 22 minutos me llevo casi el doble. Cuando llegue al chorrito de agua me moje la cabeza. Como me lamente no llevar dinero para comprar un helado. Ya en Loma Serrano decidi pararme a descansar, me quite los zapatos y las medias, me comi una galleta maria mientras veia la gente pasar y pasar.
Despues de igualmente unos 5 minutos decidi proseguir. Baje hasta quebrada chacaito y segui al pgp chacaito, sin muchos cambios en mi condicion fisica para ese momento, corriendillo y, con todo que iba lento, pasaba a las personas que venian a turistear a las quebradas. En ese punto el milagro que habia pedido a Dios de que apareciera alguien conocido en sabasnieveas y me brindara un helado, bueno, con algo de retrazo pero igualmente bien recibido, aparecio un amigo al que no dude en pedirle que me brindara no uno sino dos. Me dolian los pies aunque no tenia ampollas. Es dificil describir al sensacion de cansancio que tenia en ese momento, creo que es falta de sales porque siempre que me pasa eso pienso mucho en una sopita de pollos con fideos, de esas maggie. A decir verdad camine con el amigo Michael, con helado en mano, por cientos de metros y no fue sino hasta la mitad del cortafuegos que comenze a trotar nuevamente para no pararme sino hasta la entrada del estacionamiento donde tenia el carro, donde llegue, a buen paso, ya un poco recuperado, echandome 6 horas con 12 minutos los, digo yo, poco mas de 40 kilometros.
Hace poco corri con Leonardo en el cortafuegos, le he comentado todos estos entrenamientos que he hecho, con bastante detalle, y el me ha escuchado asi le parezca ladilloso ese pocote de numeros y estadisticas que estoy acostumbrado a citar y citar... y entre otras cosas hablando de lo que uno casi ni habla cuando corre me dijo: ...ahorita correrias un maraton facil!!!!, y yo le repondi: ...tengo tres semanas haciendo uno cada domingo...
Y hablando del desnivel acumulado, tanto positivo, que denominare con el signo +, asi como el negativo que denominare con el signo - para no fastidiarme escribiendo lo mismo siempre, tengo que decir que, cuando me eche la perdida, el desnivel + acumulado fue de 4237 mts. aproximadamente..., cuando hice la ruta del maraton hebraica fue de 4417 aproximadamente y cuando hice los 4 CortaFuegos el desnivel + fue de 2767... Me generan alguna duda los valores medidos por el reloj en dichos entrenamientos pero tengo que decir que le creo, tengo que creerle. Como no creerle si el mismo reloj fue utilizado para medir palmo a palmo (y luego publicar en internet detalle a detalle) el año pasado en una carrera llamada Le Porte di Pietra, que realizan en Italia y que tiene una distancia de 7o km y pico y un desnivel + de casi 4000 metros, donde participo el campeonisimo Marco Olmo...
Y aunque cada uno de esos 40km fueron en pura montaña puedo decir que al igual que los tradicionales 42km de calle, llegue a ver el Muro del kilometro 30, que me atrapo despiadadamente en el kilometro 32/33. Esto lo experimente cuando hice la ruta del maraton de montaña del Club Hebraica, solo que en esta ocasion habia decidido partir en el estacionamiento del Hotel Avila, en San Bernardino, seguir la ruta y llegar al tanque de lo que llaman Estribo Duarte, aproximadamente a 20 km del lugar de origen. Posteriormente me regresaria por el mismo camino, cubriendo el mismo desnivel.
Recien empeze el entrenamiento de fondo laaargoo, el amigo Joao me habia sugerido acerca de una buena ruta, segun recuerdo la llamo algo asi como epica o una gran clasica. Dijo algo como que: ... ¿sabes cual seria una buena ruta?, no!, cual?... hacer la ruta del maraton de montaña Hebraica, pero ida y vuelta... No me parecio muy impresionante hacer eso, no me parecio atractiva de momento, como tambien pense en despues de estribo duarte, hacer esa bajada de 15 minutos y despues hacerla de regreso no es poca cosa, y mas cuando llevas casi tres horas de recorrido, salvo eso no me parecio "muy exigente", me parecio como una ruta muy corrible, con poco desnivel tanto positivo como negativo, para poder desplazar con velocidad, la cual no buscaba tanto como el fondo. Menosprecie, y quiza descalifique, su idea.
Pero entonces aparecio el color morado en las uñas de los pies, ese que tenia añooosss que no veia y que aparecia cuando los maltrataba mucho en las bajadas escabrosas de la montaña... Y aunque en parte se lo atribuyo a los zapatos que me quedan un poco flojos y al constante golpear del pie, con cada zancada, tengo que reconocer que es mi talon de aquiles. Ya me estaba pareciendo buena idea hacer la ruta que Joao me habia sugerido con la pequeña variante que llegaria al tanque de Estribo Duarte y me regresaria. Ya la habia medido con anterioridad y sabia que hasta alli rozaban los 20km: acerca del desnivel una vez el Polar RS800 sd me habia indicado que era cerca de 1800 metros +, pero no le crei mucho, pense que la marca no era especialista en ese campo de medir la acumulacion de desniveles. Polar es Polar.
Y llego el domingo que haria descansar a la uña morada del dedo gordo del pie. Despues de atravezar la ciudad y ver, como siempre, los espantosos choques en la autopista Francisco Fajardo, justamente donde hace un año tambien sufri un accidente, llegue al estacionamiento del Hotel Avila en San Bernardino, y a las 6 a.m. en punto arranque la menospreciada ruta. Insisti con las licras hasta los tobillos y el uniforme que habia utilizado, pense en el monte que habia en varias partes del camino. Lleve tres Power Gel, un par de galletas y el camel con red bull.
Hasta ese momento no habia hecho largos corriendo de manera continua sin alternarlo con caminar, cosa que hice en rutas anteriores por la montaña, por lo que sali a un paso basante discreto, lo que venia era bastante largo. Subi por San Bernardino sin problemas, nuevamente enfrente al cortafuegos sin ver un alma en todo el recorrido. Fue llegando a Loma Serrano que vi algun ser vivo, salvo el pollo o pichon de guacharaca que penso que me lo iba a comer y me acompaño pendejamente unos metros. En ese momento pense que ese pollo habia tenido bastante suerte, si ubiese sido un felino se lo ubiese comido papayisima, ya habia hecho mi buena labor del dia.
En el puentecitos de Sabasnieves alcance un carajo que tenia pinta que iba a hacer una ruta en el avila, pense: se esta entrenando para la carrera de montaña de la semana entrante y efectivamente asi fue. Me anime un poco con el, lo alcance y pase y segui con un paso firme sacandole cada vez mas ventaja. Ya tenia un motivo para no ir tan lento. Cuando pase la piedra El Indio vi que apenas estaba por el cruce Teneria, le habia sacado unos 8 minutos. El paso por Paraiso se me hizo largo, con todo y que iba trotandillo. Cuando finalmente llege al tanque de Estribo Duarte mi reloj marco 2 horas con 48 minutos, habia llegado a la mitad del recorrido y tocaba regresarme. Descanse unos 5 minutos, tome agua, llene el camel, me comi un power gel y asi mismo empeze a regresarme.
He corrido todas las ediciones del maraton de montaña del Club Hebraica. La han mantenido en el tiempo y se ha consolidado como una de las mas duras en el improvisado calendario de carreras de montaña que hay en el pais. En total no llega a 24 kilometros, lo que la hace dura es el desnivel y cambios de ritmo que tiene en todo su recorrido, aunque casi en su totalidad, con algunas excepciones, se puede correr. La primera vez hice 2:54 y pico. Llegue de 11 en la general, mareado, reventado, ido. Se hace mas dura cuando quieres ir mas rapido, definitivamente. Los años siguientes me he mantenido en ese orden, 2:58 y pico, 3 horas flat y en la reciente edicion 2:39 y piquito, sin duda record personal, 6to en la general y ganando la categoria por segunda vez consecutiva. A lo que quiero llegar es que en todas las ocasiones he llegado a Estribo Duarte incluso en 2 horas con 40 minutos, o casi..., ahorita llegue en 2 horas 48 minutos sabiendo que me tendria que regresar. No es tan mal tiempo, no estoy tan lento como pense.
Siguiendo mi camino procure mantener el mismo paso, a ver hasta donde aguantaba. Chequeaba los parciales donde previamente los habia marcado e incluso iba hasta 5 minutos mas rapido. Todo era el mundo feliz hasta que mi reloj marco 4 horas con 30 minutos, justo en la subida de Sabasnieves me dio un bajon arrechisimo. Algo habia fallado en ¿la alimentacion? , ¿el ritmo no tan lento?, ¿el fulano muro del kilometro 30 que me aparecio en el 33?, quien sabe, lo cierto es que comenze a caminar, muy, pero muy despacio. La subida que se puede hacer en 22 minutos me llevo casi el doble. Cuando llegue al chorrito de agua me moje la cabeza. Como me lamente no llevar dinero para comprar un helado. Ya en Loma Serrano decidi pararme a descansar, me quite los zapatos y las medias, me comi una galleta maria mientras veia la gente pasar y pasar.
Despues de igualmente unos 5 minutos decidi proseguir. Baje hasta quebrada chacaito y segui al pgp chacaito, sin muchos cambios en mi condicion fisica para ese momento, corriendillo y, con todo que iba lento, pasaba a las personas que venian a turistear a las quebradas. En ese punto el milagro que habia pedido a Dios de que apareciera alguien conocido en sabasnieveas y me brindara un helado, bueno, con algo de retrazo pero igualmente bien recibido, aparecio un amigo al que no dude en pedirle que me brindara no uno sino dos. Me dolian los pies aunque no tenia ampollas. Es dificil describir al sensacion de cansancio que tenia en ese momento, creo que es falta de sales porque siempre que me pasa eso pienso mucho en una sopita de pollos con fideos, de esas maggie. A decir verdad camine con el amigo Michael, con helado en mano, por cientos de metros y no fue sino hasta la mitad del cortafuegos que comenze a trotar nuevamente para no pararme sino hasta la entrada del estacionamiento donde tenia el carro, donde llegue, a buen paso, ya un poco recuperado, echandome 6 horas con 12 minutos los, digo yo, poco mas de 40 kilometros.
Hace poco corri con Leonardo en el cortafuegos, le he comentado todos estos entrenamientos que he hecho, con bastante detalle, y el me ha escuchado asi le parezca ladilloso ese pocote de numeros y estadisticas que estoy acostumbrado a citar y citar... y entre otras cosas hablando de lo que uno casi ni habla cuando corre me dijo: ...ahorita correrias un maraton facil!!!!, y yo le repondi: ...tengo tres semanas haciendo uno cada domingo...
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